Young Prisms – Friends For Now
Vale, ya sé, que estáis cansados del rollo shoegaze; guitarras y vocecillas etéreas, y no os voy a mentir, porque Young Prisms son shoegaze, guitarras y vocecillas etéreas ininteligibles (total, ni aunque fuese en español tampoco se entenderían). Sin embargo Young Prisms son un valor seguro. La revitalización de este estilo noventero pueden conjugarse perfectamente con la parte más novedosa como el lo-fi ensoñador, el chillwave, el kraut rock o el post rock y la densidad sonora como con tu pasado indie más clásico de melodías y saber (más o menos) qué instrumento se está tocando en cada momento en cada tema. Las influencias están a la vista: My bloody Valentine o Jesus & Mary Chain; capas y capas de guitarras, distorsión y dulces voces convierten a este álbum en una escucha adictiva.
Sin embargo estamos en 2011 y los californianos se han codeado con lo más avanzado en tierras americanas, con apariciones en splits junto a Mathemagic o Weekend que han sido editados en el sello Kanine, descubridor de pequeñas perlas como Surfer Blood, The Depreciation Guild o Braids. No es de extrañar también que Young Prisms estén de gira con The Radio Dept. y proximamente con Crocodiles o The Fresh & Onlys.
‘If you want to’, tras la breve y ambiental introducción de ‘Friends for now’, nos aporta una vital revisión de rock psicodélico que va en aumento hasta que engancha con ‘Sugar’ (con videoclip incluido) en un ensamblaje perfecto a lo etéreo. En este caso los riffs de guitarra se apoderan de nuestros sentidos con un cambio de ritmo frenético al final que puede llegar a descoyuntarnos en la pista de baile ¿Cómo se puede concentrar tanta intensidad en 3:24 minutos? Le sigue ‘Eleni’, tema algo más pop y por qué no, algo tonti shoegaze. Menos mal que ‘All day holyday’ nos da un respiro de 58 segundos para seguir con los ojos cerrados esta vez con ‘Breathless’, otra de esos temas que te pondrías una y otra vez por ese barrido guitarrero que nunca molesta, un rock agazapado que se convierte en noise sin llegar a saturar del todo tus altavoces. En ‘Feel fine’ sacan su parte más pop y le da protagonismo al bajo mientras que los golpes secos de la batería nos mantienen en constante tensión. Ayuda que el final de cada tema sean las guitarras distorsionadas al azar las que les pongan punto y final, rasgo tan de los banda de rock de los 90. ‘Stay Awake’ nos advierte que nos mantengamos despiertos y sin embargo es la que cierra el disco, y nos deja con los pies en la tierra.
Unas veces más garage, otras más pop y otras más rockeras, Young Prisms se marcan un disco con distintas influencias, tenso y amable por partes iguales y claro, algo repetitivo, pero es que el shoegaze es así.
Puntuación: 7/10 | Escúchalo: spotify