Top 10: cuando la versión supera al original (II)
Segunda parte de la lista que recoge lo mejor de los covers que mejoran lo que en ocasiones parecía inmejorable (en otros casos si que lo eran). Como ya pudisteis comprobar, la versiones que aparecen son siempre grabadas en estudio, ya que si tomamos las que muchas bandas interpretan en directo la lista sería una locura.
5. Sugababes – ‘Freak like me’
De acuerdo, coronó nuestro top 10 de sampler, pero es que como ya comentamos también es un cover del tema de Adina Howard. Pasar de un r’n’b de mediados de los 90 más bien ramplón (¿soy yo, o todo el r’n’b de aquellos años suena igual?) a una joya electro-pop dice mucho del talento de estas señoritas (o de su equipo). Frotar la cebolleta nunca tuvo tanto estilo.
4. Saint Etienne – ‘Only love can break your heart’
Lo que era un buen tema de Neil Young la banda inglesa la recicló con maestría y la delicadeza de la voz de Sarah Cracknell le dio un nuevo prisma. Por si fuese poco la podíamos bailar, con arreglos electrónicos muy cuidados y el aura naïf que la convierte en una pieza especialmente encantadora. Si las canciones fuesen personas, nos iríamos con ella de picnic con mantel a cuadros y cesta incluidos (aunque hable de romper corazones).
3. Astrud – ‘Bailando‘
El dance en español de principio de los noventa tiene unas cuantas perlas kitsch como este tema de Paradisio (que en realidad eran belgas). Genis y Manolo lo reformaron más en su contenido que en su forma (cuando suele ser al revés), incluyendo el famoso “sí, señor, corona de cristales… sí, señor, una felación”. Un must de toda pista de baile que se precie y un punto y aparte dentro del indie español, tomando lo casposo como algo muy nuestro y hasta cierto punto digno de reivindicar.
Un imprescindible dentro del mundo cover. En realidad se podría escoger más de una versión de los American Recordings que superen al original, pero ésta de NIN, con la áspera voz de Cash y por el matiz que le otorgó la muerte del artista pocos meses después, merece pasar a los anales. Por no hablar del vídeo (obra de Mark Romanek), más grande que la vida misma, con un in crescendo visual emotivo hasta la lágrima.
1. Pet Shop Boys – ‘Always on my mind’
Queda muy mal denostar a un mítico como Elvis, pero es que Pet Shop Boys, a su estilo, también lo son. Que sí, que la original es tierna y preciosa, pero con la versión de 1987 podemos marcarnos un epic-dance de los de levantar los brazos mientras trazamos círculos en el aire con las manos. ¿Y el momento “Teeeell meeee…”? Himno. Porque no queremos incluir más de una canción por artista, pero ‘Go west’ también se merecería un puesto en el top.
jarto