The Dodos – No Color
The Dodos publicaron en 2008 el álbum Visiter, recibiendo excelentes críticas gracias a su fresco psych-folk melódico con la característica percusión de la que hacía gala. Un año más tarde volvieron al panorama musical con Time To Die, un trabajo que no fue tan bien acogido, siendo injustamente vapuleado en algunos casos. Puede ser que aquel largo no contase con el carácter genuino de su predecesor, destilando un espíritu más pop, y sin embargo tampoco decepcionaba (ni encandilaba, también es verdad). Este mes vuelven con No Color, prescindiendo de Joe Haener y con la incorporación de Keaton Snyde, decisión que, junto a la recuperación de la esencia original de la banda, parecen motivadas por el mencionado fracaso de hace año y medio. Tampoco nos vamos a quejar: lo que tenemos entre manos es un buen ejemplo de talento y consistencia.
Lo primero que percibimos es el regreso a las baterías tribales y crudas del primer álbum, que les encaminan de nuevo por el freak-folk más visceral y naturalista. ‘Black night’, primer corte, es una declaración de intenciones desde el segundo uno, una vuelta a sus raíces con el perfecto equilibrio entre fuerza y belleza. El dúo siempre se ha mostrado gustoso por incluir voces femeninas en algunos de sus temas, por ello en esta ocasión han tenido la suerte de contar con Neko Case para aportar su inconfundible aire country-pop al conjunto. Canciones como ‘Don’t try and hide it’ se benefician de la presencia de la de Virginia, aportando cierta suavidad al terremoto de percusiones y guitarras desnudas.
‘When you will go’ supone un ligero descanso entre tanta intensidad sonora, destacando la deliciosa interpretación vocal acorde con el acompañamiento de Meric Long. El enérgico y optimista cierre, ‘Don’t stop’, recupera la cordura frente a ‘Hunting season’ y ‘Companion’, que lastran (lo justo) el final del álbum.
No Color plasma la honestidad y coherencia de una banda que nada reinventa, pero conquista. Es cierto que peca de cierta homogeneidad sonora (también presente en Visiter), algo que por otra parte forma parte de su personalidad; pero el agudo olfato melódico, el desparpajo y la inteligente utilización de los escasos elementos lo convierten en álbum a tener en cuenta. Además, una píldora de vitalismo nunca está de más.
Puntuación: 7, 75/10 | Escúchalo: spotify
jarto