Dorian Concept, Oneothrix Point Never y James Pants
Gratis y en domingo, mezcla explosiva para la masiva participación ciudadana. Luego no fue para tanto, mejor, porque el espacio se hacía necesario para los movimientos corporales que durante 3 horas teníamos por delante.
La entrevista previa a Oliver Thomas Johnson de Dorian Concept delató el grado de improvisación de los artistas electrónicos a la hora de hacer música con las máquinas y lo bien que compatibilizan los recursos más modernos con los sistemas analógicos. Según sus palabras «no sé muy bien como crean música con esta tecnología [refieriéndose a un Mac]» o cuando dijo «lo primero para hacer música es tomar palabras clave como ‘electro’, ‘techno’…». Tras la entrevista Dorian Concept se puso tras su portatil para recibir la jornada de conciertos. La noche de esta manera resultaba menos tensa tanto para los artistas como para los asistentes. El hecho de que fuera gratuito ya no hacía enfrentarte al espectáculo como participante activo con la esperanza de esa compensación económica; además el entorno didáctico del la Academia nos hizo simplemente disfrutar del evento, algo que se notaba en el ambiente.
Dorian Concept es otra de esas jóvenes promesas salidas de la efervescencia dubstep, caldo de cultivo de jóvenes talentosos aprovechando el tirón de las modas que le han visto crecer. Oliver se centra en el post-dubstep con las miras puestas en los sonidos de club de los 90 que lo hace envolvente y cool al mismo tiempo. La gente respondía ante los estímulos proyectados y la energía con la que Oliver se dirigía a su portátil. Agradecidos estábamos de que esta joven promesa improvisara y nos deleitara con un dubstep vigoroso, bailongo y de club, algo así como el drum’n’bass de los 90 que se escuchaba en los sitios urbanos más selectos.
Oneothrix Point Never o Daniel Lopatin salía al escenario orgulloso de su barba pelirroja y orgulloso también de protagonizar uno de los mejores lanzamientos con su banda Games, ahora Ford & Lopatin y Airbird. Si antes podiamos dudar algo sobre su eficacia, con este directo se puede confirmar el nombre de Daniel Lopatin como uno de los mejores artistas electrónicos del momento. Podríamos criticarlo por ser otro de tantos que recupera los sonidos de épocas pasadas y lanzarlo su rubor a la escena musical independiente. Esto es cierto, pero unos lo hacen peor que otros y Daniel cumple con sobresaliente en la tarea de recuperar el legado ambient y ponerlo a nuestra disposición de manera magistral. Se preocupa en el detalle, tiene sentido del humor, abarca tanto el ambient como la música concreta, añade graciosos pianos vintage y voces negras que aporta emoción a lo electrónco, y todo ello ensamblado sin que parezca que se ha realizado un gran esfuerzo en hacerlo. Si no fuera por todo lo anterior dicho, las imagenes podrían resultar bastante pretenciosas: momentos new age, la era virtual como protagonista, errores VHS sobre pantalla televisiva como forma de arte superpuestas por el Vj, que redondeaba la propuesta musical de su nueva entrega Replica.
Por último era James Pants el encargado de cerrar la ceremonia electrónica. Y no podía ser otro. El excéntrico artista supo como llevarse al público al bolsillo. Su eclecticismo musical le convierte en un alquimista musical solo superado por Daedelus con momentos brillantes rescatados de un sabor añejo (para muestra una versión electrónica de Mr. Sandman Bring Me a Dream y con 3 discos bajo el brazo donde se entrelazan la psicodelía, el electropunk, el cosmic hip hop con el resultado de un orfebre musical. Su espectáculo fue una montaña rusa de emociones con un James Pants enérgico a la batería electrónica, con micrófono en mano interpelando al público y unos espamos corporales que animaban sobremanera. El momento más brillante fue la mezcla de Radioactivity de Kraftwerk con la banda sonora de Psicosis de HItchcock, la introducción de sonido para Windows 95 de Brian Eno y un final apoteósico con Suspicious MInd de Elvis Presley.
Tres hombres en solitario, tres propuestas diferentes electrónica que avecinan el futuro alentador de la electrónica.
Puntación: 10
Cicuéndez