Florence + The Machine y la ‘supremacia blanca’
La semana pasada se estrenó el vídeo No light, no light de Ceremonials, el último gran disco de Florence + The Machine. Con un punto excesivo y grandilocuente muy acorde con su música (un pelín hortera incluso), el clip ha gustado bastante. O eso pensábamos, porque varias voces se han alzado en contra del supuesto racismo del mismo, donde se puede apreciar una clara diferencia entre el blanco y el negro, el bien y el mal, la luz y la oscuridad, ésta última representada por un hombre negro haciéndole un rito vudú a Florence, por el que cae desde lo alto de un edificio y es salvada por un coro de niños blancos. Un ejemplo de esta protesta es Racialicious, una importante web que analiza la relación entre cultura pop y racismo, donde alegan que se trata de una reinterpretación de la supremacía del hombre blanco.
La verdad, no tengo ni idea de si Florence es racista o fan de Macaco, pero el análisis de esta web me resulta tan rebuscado (y no será la única ni en el único caso) y le dan la vuelta a la tortilla de tal manera que lo único que dan ganas es, más que de indignarse, de reír. Puede que hasta tengan razón y la finalidad del director era la de aupar la supremacía blanca. Sin embargo, no es esto lo que nos interesa. Lo que realmente da que pensar es que en muchos casos se basarán en argumentos tan pobres y manidos simplemente para afianzar el pensamiento del mundo racista en el que vivimos, que por una parte también es cierto, pero tampoco hay que buscarle tres pies al gato. En mi caso, que pongo en la misma posición a un negro que a un blanco, no me había percatado de esta supuesta apología del racismo. En la explicación del vídeo en el primer párrafo especifico que el hombre es negro y los niños blancos, pero si no conociese la mentada polémica y me preguntaran de cuál es el argumento ni especificaría razas. Puede que viva en el mundo de la piruleta, a saber.
Yo soy homosexual, y la verdad, salvo cuando veo Intereconomía o algún medio del estilo (con los que me echo unas risas), no estoy contemplando discriminación por la orientación sexual cada cinco minutos. Evidentemente la hay, pero normalmente la gente que odia a los negros o a los gays no cuenta con la sutileza e inteligencia para promulgar algo que no sea descaradamente directo. Exacto, como un elefante en una charrarería. Y si alguno goza de esta virtud, tampoco se puede ir acusando de ‘loqueseafobia’ a la primera de cambio, sobre todo porque esas diferencias que quieren erradicar al final salen a la luz, abandonando la ansiada normalidad que tanto buscan pero a la que a su vez ponen trabas. Gente tan políticamente correcta que buscará esa anormalidad donde en realidad no suele haberla. Por supuesto, no ha sido ni la primera ni será la última vez que suceda.
PD: no ha sido el único vídeo de la artista tildado de racista.
jarto