Jagwar Ma – Howlin
Durante el último año y medio el dúo australiano Jagwar Ma ha ido revelando diferentes temas que reflejaban gran variedad estilística con la psicodelia como lazo de unión. Todos resultaban infalibles ejercicios de imaginación sonora que a pesar de tomar influencias de variedad de artistas y épocas (¿y quién no?) hace gala de una personalidad carismática y definida, al estilo Animal Collective, aunque manteniendo las distancias (todavía tienen que crecer). Un collage que se amplía en Howlin y que bien refleja su portada, donde la frescura y el encanto de una primera vez inundan nuestro oído, y que además se extiende al resto de sentidos (¿alguien huele el mar?, ¿los colores ácidos os ciegan?). Han recogido con éxito el testigo del madchester, subgénero nacido a finales de los ochenta que tomaba retazos del house o la new wave, y le han aplicado un barniz de modernidad en el mejor de los sentidos.
Para confirmar la idea de collage y la recuperación del género solo hay que disfrutar de la versión original y extendida de The throw, un cruce entre la esencia del jangle pop y la neo-psychodelia que lejos de resultar cargante debido a su duración (casi siete minutos), incluye un maravilloso último tramo de desfase electrónico que hipnotiza. Siguiendo con las canciones rescatadas de sus lanzamientos previos, no falta ni una, incluyendo What love, que gana enteros como introducción del álbum, la playera Come save me y el arrebato house de Four.
Man I need también la conocíamos como primer single oficial, mostrando una vertiente más clásica, en la línea de Tame Impala, que se reafirma a través de la instrumental Exercise, enlazadas en un lisérgico viaje sesentero pero remozado (la línea de base, el final ambiental de la segunda). Otros temas nuevos como That loneliness, Let her go o Uncertainty se muestran también algo más tradicionales que sus hermanos mayores, pero en este caso disfrutando de ese aire juguetón y soleado con una pizca de descaro que alegraría cualquier tarde de verano. Y para finalizar el sol se esconde tras el horizonte de Backwards Belin, a modo de sosegada carta de amor de despedida.
Entonces, ¿estamos ante uno de los debuts del año? Que no quepa la menor duda. Howlin sabe catapultar las mentadas influencias hacia nuevos niveles sin perder la trascendencia ni pecar de simple copia y pega. Pero lo mejor es que no se olvidan de divertir y entretener. Porque aunque uno vaya de solemne y profundo no hace falta perpetrar un tostón para dormir al personal. Solo falta que alguien les traiga de gira y demuestren que su fiesta multicolor se puede trasladar al escenario.
Puntuación: 8 I Escúchalo: Spotify
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