Julia Holter – Loud City Song
Nos gustan las cantautoras, esas tímidas féminas por las que no apostarías nada en la barra de un bar pero que en cuanto se meten en su estudio-casa se muestran tal como son, desnudas ante la música, y muestran un potencial que a todos nos asustaría. Laurel Halo, Nite Jewel, Laura Grooves o Tropic of Cancer se podrían englobar entre todas ellas.
Por suerte, las dosis de Julia Holter, dosificadas, nos han mostrado lo mejor de la casi treintañera americana y multi-instrumentista a través de Tragedy, Ekstasis y éste, su tercer álbum, City Loud Song. Su punto arty, bucólico y de esmerado talento la convierten en un producto casi de culto, apartado de las masas que lo toquetean todo; si bien Julia Holter es difícil de conocer, inaccesible y accesible a partes iguales, pero con la virtud de apartar el moscón que sobra y atraer a los de la rica miel. Este forjado talento se ha llevado a cabo a través de sus primeros trabajos, más enfocados al folk y al lo-fi, y lo tímidamente experimental, pero siempre con un denominador común, su magnífica voz. Este último álbum colma las expectativas de quienes la seguían de hace tiempo y barajaba la posibilidad de una caída en picado; sin embargo, Julia Holter se muestra más brillante que nunca.
Esta vez su particular historia urbana se centra en dar voz a las solitarias almas de la ciudad a través de un esmerado trabajo de tintes cinematográficos, trágicos pulsos rítmicos –Horns Surrounding Me– y esperanzadoras melodías enfocadas a un clasicismo inusitado de alta sociedad; ha dejado de lado la vertiente más electrónica para centrarse en la voz, en los violines, en una mezcla de modern classical y new age en Hello Stranger o en la dialéctica entre el jazz de los bajos fondos y el discurso pop actual de su single In The Green Wild o Maxim’s II y City Appearing. No es casualidad, ya que en este trabajo se basa en el musical Gigi nacido de las entrañas más disfrutables de los grandes musicales de MGM allá por 1958.
Sea como fuere, en su tercer trabajo, Julia Holter se muestra más madura, consolida su estética personal y muestra muchas más paletas de su virtuoso pop avanzado. Se nota y resulta claro que está detrás de cada uno de sus temas, que además se han visto acompañar por buenos instrumentistas. De hecho participa con muchos de ellos como Michael Pisaro u Oswal Egger con los que ya ha trabajado en The Middle of Life, un trabajo de residencia donde ha dado rienda suelta a la música contemporánea, la poesía y el trabajo de campo. Y es ahí por donde vas los tiros de Julia Holter, dividido entre el público indie pero que va más allá al codearse con la contemporaneidad más clásica. Simplemente un trabajo inspirador y maduro.
Puntuación: 8 | Escúchalo: Spotify
Cicuéndez