Especial reseñas: 5 EPs que no puedes pasar por alto

eps-varios

El EP siempre ha parecido el hermano pobre del álbum, como el formato corto respecto a la película, pero desde aquí siempre lo hemos reivindicado. Porque a veces no hace falta incluir tropecientos cortes y que acaben sobrando la mitad. Por ello hemos recopilado cinco de los EPs más destacados de estos primeros meses del año para que disfrutéis de ellos en el tipo de situaciones que no exijan contar con un espacio temporal similar al de la trilogía de El Señor de los Anillos junta. Lo bueno si breve…

the-mary-onettes-portico

Aunque puede que a estas alturas sea un poco tarde, al menos para que los medios les hagan más caso, la manera de procesar cambio experimentado por The Mary Onettes desde su último disco Hit the Waves es encomiable. En Portico lo llevan a su máxima expresión, donde sin desprenderse de su origen new wave ochentera difuminan su sonido en el dream pop y shoegaze de finales de la década y comienzos de la siguiente. Sin embargo, y a diferencia de sus primeros dos discos, el resultado no suena a corta y pega dentro de que tampoco supone un trabajo novedoso ni rompedor (cuál lo es a día de hoy).

Silence is a gun, el primero de siete cortes (se trata de un EP extenso), sí que mantiene lazos más evidentes con su obra pasada, en un exquisito número que sigue mirando a bandas como Echo & The Bunnymen, al igual que en Ritual mind, en una combinación perfecta entre sutiles guitarras y teclados envolventes. Naive dream o Your place se emparentan a bandas coetáneas como Diiv o Wild Nothing, que a su vez bebían y beben de referencias de renombre, mientras que en Bells for stranger se dejan seducir por los ritmos cadenciosos y las atmósferas de un relajante viaje espacial. Para Portico: 2014, que pone punto y final al EP, se regodean en Vangelis en lo que podía ser el tema principal de la banda sonora de una película de los ochenta. ¿Su mejor obra? Posiblemente.

Puntuación: 8 / Escúchalo: Spotify linda-guilala-xeristar

Hay veces en la vida en la que llega un momento que tu actitud y formas ya no dan más de sí. No es que en un giro de 180º cambies la manera en la que te muestras al mundo, pero necesitas abrir de una patada una imaginaria puerta para pasar a la siguiente estancia de tu mente. La casa es la misma, pero en cada habitación no siempre haces lo mismo. Este es el resumen de la carrera de cualquier artista, y ahora le ha tocado el turno a Linda Guilala, que abrazan las guitarras distorsionadas estilo shoegaze y los ambientes menos luminosos, donde los arreglos electrónicos pierden peso en pro de el instrumento de cuerda por antonomasia, sonando más afilado y contundente.

Eso sí, al leer los títulos de algunas canciones como Chicas guapas (que van a trabajar en moto) o Sábados de tormenta, es fácil pensar que la vena popi de Elefant sigue dominando la obra, y es verdad que incluso Vacaciones podría encuadrarse más en su debut, pero en general se acercan más al sonido de otras bandas coetáneas como TAB. En total son seis cortes que podrían reventar la pista entre manotazos, pisotones y dislocaciones de cuello, excepto por la perla del conjunto, la intimista Lo siento mucho, la que es una de una de las mejores canciones nacionales del año. Dan ganas de ver el resultado en directo, así que si os pilla cerca algún directo, no os lo perdáis.

Puntuación: 7,5 / Escúchalo: Spotify  small-black-real-people

Hace un año reseñábamos Limits of Desire, segundo disco de Small Black que conquistaba a pesar de sus, ejem, limitaciones. Real People se puede considerar un corto más o menos continuista de este, lógico debido al escaso margen entre uno y otro, pero hace gala de las suficientes y necesarias gotas de frescura para que no suene a compilación de caras b de su supuesto hermano mayor. En esta ocasión cuentan con la presencia de Frankie Rose, que no ha dudado en aportar su voz en clave sedosa en un par de temas, entre los que destaca la balada de tintes r’n’b de corte clásico titulada Lines of latitude.

Reconstruction, que con una base más potente sería hasta bailable, supone un chute de buen rollo gracias a unos juguetones y luminosos juegos de teclado. En realidad, aunque tampoco se puedan catalogar de bailables, aparte de este tema, también el homónimo como Consequences ganan en BPMs respecto a lo acostumbrado en su obra. Sin embargo no descuidan los ambientes etéreos marca de la casa, a veces más dirigidos hacia el synth pop, como en Downtown lights. Así con todo, el EP quizás adolezca de la ausencia de un tema que fulmine, pero gracias quizás a su escasa duración tampoco se perciben bajones dignos de mención.

Puntuación: 7,2 / Escúchalo: Spotify movement-ep

A finales del pasado año vimos en Movement todo un filón, y por ello incluimos Us, uno de sus primeros temas, entre nuestras 10 de nuestras canciones de 2014. Durante esta primavera han editado su primer EP, que vuelve a incluir este elegante tema que bebe de grandes artistas actuales como The Weeknd o James Blake. Su propuesta, que se debate entre el r’n’b contemporáneo, la electrónica o el future garage, destaca por un gran derroche de sensualidad, siempre desde un prisma fantasmagórico e inquietante, que dice en voz baja: «si entras aquí, que sea bajo tu responsabilidad».

Lo único que se les puede achacar al escuchar los otros cuatro temas es que la homogenia sonora supone la tónica general, lo que no quiere decir que no estemos ante apetecibles delicatessens. Sin embargo esta no sería la manera de disfrutar la obra, no hay que ver este EP como un conjunto de cinco canciones, sino dejarse embaucar por él a través de  una experiencia sensorial que transporta nuestra imaginación a lugares y situaciones que se alejan de la realidad mundana. Así resulta evidente que las sabanas oscuras y revueltas que ilustran la portada son un fiel reflejo de lo que quieren transmitir: un ambiente enrevesado, con poca luz, donde se escuchan susurros y la confusión es moneda de cambio; disfrutas, pero a veces dudas de cómo o por qué, y también hay algo turbador en el ambiente. Bienvenidos al mundo de Movement.

Puntuación: 7,7 / Escúchalo: Spotify frida-sundemos-lit-up-by-neon

Frida Sundemo es una de las mejores «padawans» de Robyn, y aunque todavía no ha publicado ningún largo, con la calidad de sus singles y EPs, ni falta que le hace. Lit Up by Neon contiene cinco temas como cinco soles, auténticas gemas pop que además de entretener no olvidan un marcado carácter emocional, porque cuatro de cinco son baladas que socilan entre el downtempo, el ambient o el trip hop. Ahí están Neon, una melancólica balada electrónica que pone la piel de gallina, o For you, love, que ya conocimos en 2013 y que contiene una gaitas sintetizadas que de primeras chocan, pero que al final embelesan.

También muy relajada resulta Hanging by the thread, que destaca por la mejor mixtura entre arreglos electrónicos e instrumentos de cuerda (por otra parte uno de los puntos fuertes del estilo de la sueca). Y para cerrar se despoja del traje electrónico para protagonizar casi de manera absoluta Dead, un corte desnudo donde su vulnerable interpretación se gana un hueco en nuestros corazones. Luego como excepción más movidita tenemos Drawn to you, que cuenta con un estribillo que fusila sin remilgos al de Midnight city de M83, y que sin llegar a su nivel (evidentemente), sí que cuela como notable reinvención, porque siendo la mejor canción de 2011, aunque lo hagas peor, tienes que ser muy torpe para que no salga una buena pieza. Y más si hay detrás una artista escandinava, que ya sabemos que ostentan la receta pop perfecta.

Puntuación: 8 / Escúchalo: Spotify

Compártelo:
No Responses

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.