Himno LGTB+: Madonna – «Vogue»

Nadie pone en duda la condición de icono gay o LGTB+ de Madonna, pero en los ochenta, a pesar de que siempre se mostró muy cercana al colectivo, musicalmente hablando, obviando su inherente frescura pop, esta relación no resultaba tan rotunda. Pero entonces llegó Vogue, que de primeras se iba a quedar de mera cara b de Keep it together, pero los ejecutivos de su sello comprobaron su potencial y lo quisieron publicar como single. A partir de aquí ya conocemos la historia; número uno en medio mundo y una de sus canciones más conocidas, además de una de las representativas de los noventa. Representativa, sí, pero paradójicamente tomaba un estilo ochentero; pero así es Madonna, que (antaño) ponía de moda todo lo que tocaba.

El vogue era y es un baile típico de la escena gay, especialmente negra y latina, de los ochenta en Nueva York, y ella, haciendo acopio de un apropiacionismo descarado, lo convirtió en un fenómeno mundial para la masa blanca. Por suerte el poso gay seguía muy vigente en este adictivo número de dance pop de marcadas trazas house, que plasmaba el escapismo que suponía la pista de baile para un colectivo muy repudiado por aquellos años. El icónico vídeo dirigido por David Fincher supuso la guinda del pastel para que todo quisqui intentase imitarla coreografía (con fatales resultados, salvo excepciones). Así, a pesar del ansia explotadora de Madonna, hay que reconocer su labor para extender la cultura gay entre la de masas, y este hit, amén de otros intentos más o menos acertados, supuso su mayor éxito. Ah, y por supuesto, ¡feliz cumpleaños, Madge!