En el punto de mira: Vagina Asesina
Ana Casero, madrileña de 23 años, poetisa y con formación en violín, ha decidido crear un proyecto musical totalmente en solitario con las coordenadas del punk como bandera. Un estilo que últimamente no anda muy en boga, con excepciones como Belgrado, por ejemplo, en el espectro de la música visible, pero que sin embargo suponemos sí funcionará en el subterfugio.
Sin embargo, no se ciñe al punk primigenio sino que lo hace con ironía e inocencia, sin pretensiones ni distorsiones. No quiere sonar a La Polla Records ni a Manolo Kabezabolo, ni a La movida madrileña, si bien son inevitables influencias. Sus letras feministas, irónicas, ingenuas y descreídas las ponen en una posición de preferencia para tomar las riendas de su propio camino, un punk donde resuenan las cuatro paredes de su habitación pero con un toque pop que no hacen que sea una despojada de la vida.
De momento tiene pensado sacar su primer Ep, sin fecha de confirmación. Bien seguro que cuando podamos salir a las calles la veremos subida a un escenario, en una casa okupa o donde sea.