Kesha pasa de todo en «Fine Line» y «Eat the Acid»
Kesha fue una de esas popstars prefabricadas de los 2000 que se vio atada a un tipo de vida que ella no quería. Lo que no quiere decir que no despachara hits de los más guarros y satisfactorios. Tras romper con todo, hace unos años nació una Kesha que daba un giro a su sonido y estilo, pero manteniendo aún ese punto comercial. Al menos hasta ahora.
El 19 de mayo de publica Gag Order, su nuevo disco, donde volverá a ahondar en toda la trifulca legal y emocional que supuso su batalla contra Dr. Luke. Y escuchando los dos singles de adelanto, Fine Line y Eat the Acid, parece que le da igual que triunfen o no. Son temas sosegados con una producción muy detallada y sutil, con interesantes toques experimentales, como el momento cuasi Björk y ANOHNI en el primero, o el subidón etéreo de la segunda.